La propuesta del gobierno dominicano de eliminar los incentivos destinados a la Ley de Cine, como parte de la reforma fiscal, ha generado una variedad de opiniones entre los actores del sector cultural y cinematográfico del país.
La ministra de Cultura, Milagros Germán, fue una de las primeras en salir en defensa de los cambios. Comparó el ajuste fiscal con el pago de mantenimiento en un edificio.
“Es como cuando vives en una torre y tienes que pagar por mantenimiento… y a veces te suben el mantenimiento y a veces tienes que dar cuotas extraordinarias, de eso se trata”, expresó Germán, aludiendo a que estos cambios son necesarios para el equilibrio de las finanzas públicas.
Por otro lado, Iván Ruiz, director de la Radio Televisión Dominicana (RTVD), manifestó que, si bien no apoya la eliminación total de los incentivos, considera que la ley necesita una revisión. Ruiz apuntó que algunos cineastas han caído en una postura cómoda al no publicitar ni mercadear sus películas, lo que se traduce en bajas recaudaciones en taquilla.
“Hace 10 años que ya no publicitan ni mercadean las películas; hay películas que no tienen mucha recaudación porque ya tienen el dinero asegurado. O sea, mi opinión es que hay que revisarla”, expresó el director de RTVD.
Desde la Dirección General de Cine (DGCINE), se filtró una nota de prensa en la que se menciona la baja venta de taquilla como un motivo para evaluar el impacto de la ley, poniendo en duda si el retorno de inversión justifica los incentivos fiscales que reciben las producciones cinematográficas.
En respuesta, Hans García, presidente de la Asociación Dominicana de Profesionales de la Industria del Cine (ADOCINE), expresó preocupación por los efectos negativos que la eliminación de los incentivos podría tener en la industria. Según García, estos beneficios han atraído una importante inversión extranjera y local.
“En un país donde la inversión extranjera, producto del artículo 39 (incentivo a la inversión extranjera), alcanzó en 2023 más de 12 mil millones de pesos, más de cuatro veces la inversión que se hizo a través del artículo 34 (incentivo a la producción local)”, destacó.
El debate continúa mientras los diferentes sectores sopesan las posibles consecuencias de modificar o eliminar una ley que, desde su promulgación en 2010, ha sido clave en el crecimiento y desarrollo del cine dominicano.