La muerte de Abraham Quintanilla Jr., patriarca de la dinastía musical Quintanilla y figura determinante en el ascenso de Selena Quintanilla como “La Reina del Tex-Mex”, marca el cierre de una era y revive recuerdos de esfuerzo, tensiones y logros compartidos en la música latina. Quintanilla falleció este sábado 13 de diciembre, a la edad de 86 años.
Reconocido como un líder visionario y de carácter firme, Abraham Quintanilla fue pieza clave en la formación artística de sus hijos, impulsando con disciplina y perseverancia la carrera de Selena hasta convertirla en un ícono internacional, así como la consolidación profesional de A.B. Quintanilla como compositor y productor.
Su relación con la música estuvo profundamente marcada por el sacrificio, el trabajo constante y una férrea disciplina, valores que imprimió en cada miembro de su familia y que se reflejaron en una trayectoria artística que trascendió generaciones y fronteras.
Hoy, seguidores y artistas reconocen el impacto de un hombre cuyo rol fue fundamental para comprender la historia y el legado de Selena y sus hermanos en una industria donde el éxito rara vez llega sin grandes renuncias.
El legado de Abraham Quintanilla permanece vivo en la música y en el ejemplo de una dinastía forjada con trabajo, carácter y perseverancia. La noticia de su fallecimiento fue confirmada por su hijo A.B. Quintanilla a través de redes sociales.
